Logo_ffm

El Hombre tras la máscara

La fascinación por las calaveras es de larga data, podemos remitirnos a los albores de la humanidad, la cabeza ósea o cráneo humano y su valor simbólico, no solo engloba al mundo del arte, su utilización es muy amplia, que abarca numerosas culturas y épocas. En síntesis sería el símbolo de la muerte, pero este significado puede variar o tener matices según quien se apropie de este icono.

La calavera, es el emblema de la caducidad de la existencia, como se evidencia en los elementos literarios de Hamlet y de Fausto. Sin embargo, como la concha del caracol, es en realidad lo que resta del ser vivo una vez destruido su cuerpo. Adquiere así un sentido de vaso de la vida y del pensamiento, simbolismo que encontramos en los libros esotéricos que tratan sobre la transmutación.

Su uso
La encontramos en advertencias de peligro de sustancias tóxicas o zonas de alto voltaje, en la estética de muchas bandas de rock, un ejemplo de ello es el logo del grupo americano de horror punk The Misfits, en la simbología de algunas divisiones militares, en enseñas de piratas y bucaneros, por ejemplo en la bandera del pirata Edward England. Como símbolos funerarios en cementerios o iglesias, en algunas velas para rituales mágicos, en grabados de alquimia, en rituales masónicos, en la insignia de la sociedad secreta Skull and Bones (Calavera y Huesos), en la tradicional fiesta del  Día de Muertos mejicana, etc.

De forma más reciente este símbolo a hecho una brusca incursión en la indumentaria militar utilizada en conflictos armados de países como Siria, Irak, Libia. Igualmente, en México, se apropian del mismo en la guerra de la droga.

¿Por qué desestimar?
En nuestro país, las instituciones encargadas de impartir justicia mantienen una disputa contra las  bandas criminales armadas, cuya actuación y financiamiento desde el extranjero pretende promover una conflagración para crear un estado de ingobernabilidad y desestabilización mediante la utilización de células paramilitares que pugnan por el control territorial y social de vastos sectores. Para lograr dicho objetivo aplican sin distinción una violencia que no tiene parangón en la historia actual de nuestro país, teniendo por objetivos principales a efectivos de organismos de seguridad por cuyo asesinato se ofrecen cuantiosas sumas de dinero en moneda extranjera.

Los repartidores de muerte, que no son precisamente los organismos del estado, crean zozobra y pesar sobre los sectores populares. La pretensión no es parcializarse en favor de uno u otro pero la verdad está a la vista y los deseos de satanizar las fuerzas de seguridad y orden público son demasiado notorias, por eso la necesidad de dedicarle unas palabras a la verdad y el honor.

La aplicación de la justicia no puede ser agradable ni cándida, por el contrario, debe ser severa y aleccionadora para sentar precedentes que permitan desmembrar de una vez y para siempre los elementos terroristas que mantienen al filo de la navaja a nuestras comunidades.

La máscara satanizada y los criminales inocentes
El hombre de la máscara pudo ser cualquiera, el hijo o hermano de alguien, el padre de algún niño, no se pretenda entonces darle un enorme y monstruoso valor simbólico a una figura que oculta la identidad para resguardad su integridad y la de su familia, para preservar la vida. Ya que una vez que el hampa te identifica y cataloga como un posible enemigo; no tienes escapatoria.

Para muchos, es solo la máscara de la justicia, cuyo portador decidió salir a combatir por el bien común y restablecer la institucionalidad y el estado de derecho en lugares donde algunos pretenden dirimir las más insignificantes situaciones “so pena de muerte”, hecho digno de ser repudiado y ante lo cual guardan silencio los que vociferan sobre un supuesto plan de exterminio social haciendo el juego a los enemigos de la patria y las leyes, pero como ya quedó demostrado en otras oportunidades, los derrotaremos y la verdad saldrá a la luz.

El que tenga ojos que vea, el crimen existe y… ¡debe ser combatido!

No hay comentarios.

Con tecnología de Blogger.